martes, 16 de octubre de 2018

El abogado descalzo (Chen Guangcheng)


Hoy, que he dado un rodeo para llegar al trabajo por no atravesar por el paseo de los castaños (pues te puede caer alguna en la cabeza), he terminado de leer El abogado descalzo (2015), de Chen Guangcheng (1971). Hace un tiempo, un amigo extremeño me comentó que había estado en la biblioteca del barrio de Villaverde (Madrid) y, en la estantería de novedades, se detuvo en ojear el libro de ensayos de Lewis Mumford, Interpretaciones y pronósticos (1922-1972), estudios sobre literatura, historia, biografía, técnica y sociedad contemporánea, y El abogado descalzo, el cual se llevó prestado y, a pesar de sus ocupaciones, leyó, quedando impresionado por la lucha de este hombre.
Chen Guangcheng había nacido en la China rural y perdió la vista. Entrado en la adolescencia, asistió a una escuela especial para invidentes, de la que pasó a cursar medicina tradicional china en la universidad, una de las escasas carreras que le estaba permitido estudiar. Volvió a la aldea y dedicó sus energías a defender a la gente discapacitada y al empeño por conseguir que llegase agua potable a la población, además de a denunciar las esterilizaciones forzosas que conllevaba la política del descendiente único.
Su activismo era molesto y traspasó fronteras. Era acusado de abogado descalzo ‒abogado sin título‒. Tanto que, en 2006, fue condenado a cuatro años de cárcel y, a la salida, a permanecer dos años más recluido en su casa. Fue en esta época cuando planificó la huida, que emprendió en una mañana de abril de 2012. En su invidencia, tenía interiorizado el recorrido, que pudo finalizar sin toparse con ningún guardia de los que le vigilaban. Llegó a la embajada de EE. UU. en Pekín y, desde allí, a Wahsington C. D.
Como bien decía mi amigo, es un libro duro, pero un ejemplo de quien lucha contra los monstruos que agitan la ley y se oponen con violencia a los atisbos de dignidad humana.

2 comentarios:

  1. La verdad que hay gente admirable. En esas condiciones demuestra una gran capacidad para superar obstáculos.

    Saludos.

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    Respuestas
    1. Ya lo creo, Anónimo. Otra cosa son los intereses de naciones como EE UU y China en torno a estas personalidades.

      Saludos.

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