La biblioteca es el reflejo de la sociedad a la que informa y a la que sirve, los usuarios de las bibliotecas han cambiado tanto en lo que buscan como también en la edad.
Hoy por hoy es muy habitual ver niños de corta edad (algunos enganchados en la teta) acudiendo a la biblioteca con sus padres la mayoría, pocos son abandonados a su suerte en la sala infantil mientras sus progenitores van al super a hacer la compra, pero haberlos haylos.
Los estudiantes que antiguamente acudían a la biblioteca a hacer los deberes porque en sus casas no podían permitirse el tener una buena enciclopedia por el dineral que eso suponía, hoy por hoy prefieren ponerse en el ordenador porque todo lo encuentran más facilmente en la red.
Son numerosos los inmigrantes solicitando un ordenador para estar de alguna forma en contacto con su país a través del messenger o simplemente consultando periódicos digitales en su idioma.
Por las mañanas son muchos los mayores que acuden a por la prensa local (con auténtica ansia acaparan todos los periódicos que pueden antes que los demás) y pasan un buen rato en las bibliotecas que en la actualidad han dejado de ser lugares tenebrosos y tétricos atendidos por bibliotecarias feas y gruñonas para convertirse en auténticos templos del saber, de la información al frente de las cuales está todo una variopinto plantel de personal femenino y masculino, joven, moderno, actual, glamuroso, chic, desenfadado...etc
La biblioteca es consciente del cambio y a él se adapta gustosa estando al día de las innovaciones tecnológicas, pero también es consciente de que para todo esto hace falta pasta.
Y también al estar al día de lo que pasa en el mundo y en España en estos momentos de desaceleración (ejem, ejem) nos apuntamos a lo digital como en la foto mientras no quede otro remedio, ahora cuando vuelvan mejores tiempos que alguien se acuerde de nosotros un poquito más.
Lo digo muchas veces: me encantan las bibliotecas. Me gustaban las bibliotecas de libros, pero también me gustan las bibliotecas de ahora, multimediales y abiertas a todos. Esperemos que esa sociedad "digital" pase a imprimir su huella en la calculadora para dotarlas de presupuesto. Invertir en bibliotecas es una inversión de las de verdad, el combustible de nuestras vidas.
ResponderEliminarParece ser que es el momento de las reivindicaciones, pues nada subámonos al tren,es cierto que a la hora de repartir los presupuestos la cultura sigue siendo perjudicada y el porcentaje de los ciudadanos que utilizan los servicios bibliotecarios es cada vez más alto.
ResponderEliminarMuy alto, nuestra preparación mucho mejor pero nuestro reconocimiento y por ende nuestro salario sigue igual que hace años, se nos pide y exije mucho y no se nos ofrece nada, un poquito de motivación no vendría mal.
ResponderEliminarel combustible de nuestras vidas
ResponderEliminarQué frase mas buenona!, claro que sí!...
Aich!, me quedo con lo de personal moderno, actual y chic (lo de glamuroso no por la definición esa que tanto le gusta a Bipo)... Dan ganas de soltar la frase aquella de Manolito: "Cómo molo!" XDDD
El ser así no cae del cielo querida, tanto estirar los leuros para estar chic, va a ocasionar que hasta el ministro de economía nos pida consejo, si señor si, digitales y todo, y además a la moda
ResponderEliminar¡Ondia!pero si parecen los Ángeles de Charlie... Yo quiero ser así, de maciza, de dinámica de wuenorra... y en vez de bolsas por supuesto cargar en mis delicadas manos las últimas novedades editoriales... XDDDD
ResponderEliminarEn serio no se nos valora en su justa medida, somos la bomba, porque nosotras lo valemos....
¿dónde están? no se me despisten
ResponderEliminarPique a ver si nos encuentra en la casa del padre Emilio..., que teníamos unos asuntillos pendientes....
ResponderEliminarLo que he deducido con simple lectura es que carecéis de abuela.
ResponderEliminarPero eso está bien. Ir a trabajar con moral y sin espejos
Lo que he deducido con simple lectura es que carecéis de abuela.
ResponderEliminarPero eso está bien. Ir a trabajar con moral y sin espejos
Lo que he deducido con simple lectura es que carecéis de abuela.
ResponderEliminarPero eso está bien. Ir a trabajar con moral y sin espejos
De verdad que el miedo hace mucho a la hora de escuchar, pero es más poderoso el interés por el conocimiento, porque de la época de monjas se me ha olvidado casi todo, y esque la mano la tenían muy alegre.
ResponderEliminarTía Bipo!, encima de decirnos que no tenemos espejos (de lo que se deduce que si los tuvieramos no diríamos que molamos) nos lo dices tres veces! XDDDD Beso
ResponderEliminarBipo, ¿Has desayunado morcilla? XDDDD
ResponderEliminarUy abuela dice... yo no llegué a conocer a nuinguna, pero para eso tengo a mis hermanas de congregación (y ellas a mí) para decirnos que somos la leche y reirnos de todo ;)
Si no existiera lo digital, habría que inventarlo para disfrutar de vuestro solapamiento.
ResponderEliminarVolviendo al origen de la anotación, diré que disfruto también mucho leyendo los periódicos digitalizados del siglo XIX (BNE, Diputación de Barcelona...). Un mundo a nuestro alcalnce (¡y qué mundo!). Aunque también soy víctima de la digitalización "ab infinitum" que nos van metiendo en las bibliotecas, la cual exige la ofrenda propiciatoria de nuestra atención y nuestro espíritu.
¿qué es una abuela?
ResponderEliminar¿cómo es una abuela?
¿quien tiene una abuela?
No nos hace falta, lo que nos hace falta es más pasta gansa para poner las bibliotecas a la última como servicio puntero que és y restaurar nuestro glamouroso fondo de armario... XDDDDD
pa que queréis una abuela???
ResponderEliminaren tiempos de crisis las bibliotecas me da ami que se llenaran mas y mas trabajo tendreis
"...las bibliotecas que en la actualidad han dejado de ser lugares tenebrosos y tétricos atendidos por bibliotecarias feas y gruñonas para convertirse en auténticos templos del saber, de la in..."
ResponderEliminarparece que los usuarios salimos mas mejor ;)
Creo que si, muchísimo más mejor... XDDDDDDD
ResponderEliminar¿Seguro que ya no hay bibliotecarias feas y gruñonas? Um...
ResponderEliminarQuedar, quedar alguna queda, no la vamos a matar, pobre... pero son pequeños reductos de una especie a extinguir. XDDDDDDD
ResponderEliminaralgunas quedannnn, en Chile, parece que como somos un pais en desarrollo, no como en la Europas, aun tenemos de esas feas y gruñonas.... pero VIVA LA GLOBALIZACION... gracias a esto sabemos lo que realemnte se necesita!!!! aqui yo empece con el exterminio jajajjajajaja (que mala soy)
ResponderEliminarMuy bien bibliotekaro tú llena todo con tu estilo chic y con esos taconazos que te gustan, acabemos con las faldas hasta los tobillos y los moños, ¡VIVAN LOS ESCOTES! Y ¡LOS BIBLIOTECARIOS MACIZORROS!, de esos cada día hay más, aunque todavía andamos escasas.
ResponderEliminarApoyo la reivindicación de más dinero para las bibliorecas públicas porque son necesarias, porque son uno de los pocos refugios ante el ruido de fuera, uno de los últimos lugares en donde físicamente sabes dónde está la cultura y que todo aquello merece la pena.
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