En una entrada anterior ya hicimos referencia a que en estos tiempos de crisis y pandemías (bueno ese es otro asunto que me trae frita, mascarilla ¿si? ¿no?) las bibliotecas se asemejan a los brotes verdes que ven algunos.
Desde que comenzó esta adusta temporada de vacas flacas, la asistencia a las bibliotecas ha subido un 10%.
Abren algunas pobres bibliotecas 24 horas (manda güivels).
Y las bonísimas intenciones de la UNESCO de facilitar el acceso a la lectura a todo el mundo, con miles de libros digitales gratis se ha convertido en realidad (aunque alguna quiera acabar con este gran avance y sueñe con un mundo Sinde-scargas).
Por otro lado el asunto de los libros electrónicos y su convivencia con el libro de papel de toda la vida, es un hecho. Se terminaron las alarmas sobre este aspecto ya que mucho tienen que cambiar las cosas para que el libro electrónico sustituya al clásico de toda la vida (Borges ya dijo que el libro era el mejor invento del hombre) y su convivencia insisto, hoy ya es real.
La razón de redundar en este tema ha venido por un artículo publicado en el Magazine del Mundo del fin de semana pasado en el que se plasma todo esto. Me ha hecho ilusión ¡vaya!, resulta que no estamos en babia y opinamos igualico que el director general del libro "Rogelio Blanco" al que no tenemos el gusto de conocer. (no hay trampa)
El término utilizado es "overbooking", como en los vuelos transoceánicos.
Efectivamente, así ha sido en los últimos meses (ahora en verano se relaja la ocupación), y este aspecto esperamos que sea tenido en cuenta a la hora de distribuir los presupuestos de cada administración porque las dotaciones para las bibliotecas, es tradicional que se resientan, casi siempre por ignorancia supina de los de arriba.
Claro! que podríamos entrar en la situación de todos los que trabajamos en las bibliotecas (hasta las de abierto 24 horas que de cara a las elecciones queda molón), ahí ya la dejadez y la desidia del plantel gubernativo es alarmante...
Hoy en día son muy pocas las bibliotecas que no están abiertas 24 horas al día los 7 días de la semana. Para eso tenemos web y acceso a muchos servicios a través de Internet,para el resto de servicios, el trato directo y la amabilidad del bibliotecario, de Lunes a Viernes es más que suficiente, creo yo.
ResponderEliminarY tanto! eso digo yo!
ResponderEliminarBueno, ya se sabe que el cariño se agradece a todas horas. Además, según dicen, "siempre se recibe más de lo que se da".
ResponderEliminar(La fotografía es bien ilustrativa. ¿Qué estará soñando?)
Je,je... tal cual... qué bien se está en la biblio, calentito, blandito, sin ruido... a todo lujo!!!!
ResponderEliminarEstará soñando que cuando vuelva a casa, no estará tan agusto, no. ;)
Creo que se está ofreciendo un gran servicio, que es una pena que esté tan desaprovechado, porque todavía hay mucha gente que no nos conoce.
ResponderEliminarEstoy con vosotros en que los horarios de cara al público son más que suficientes, además Internet hoy en día nos permite estar abiertos el resto del día.
Para qué 24h??? esta gente no tiene casa o qué???
esta gente no tiene casa o qué???
ResponderEliminarA la vista está
La verdad es que en las bibliotecas da gusto estar...
ResponderEliminarYo pienso pasar mis vacaciones en la Biblioteca municipal. Aire acondicionado, espectáculo para los niños, máquina de café y wifi por la patilla, el aseo limpito, pelis pa'disfrutar, algún libro para apoyar la cabeza y hala, hala, que el verano es cortito.
ResponderEliminarQue lo del artículo, si viene a decir lo mismo, como que no me lo leo. ;)
Estaremos encantados de tenerte por aquí, hasta te pagaremos algún cafecillo por ser tú, no te digo más.
ResponderEliminarSi, y maldita sea la hora en que comenzó la crisis. Mi biblioteca se está convirtiendo en un geriátrico, jeje!
ResponderEliminarbesoooss!
Paciencia Julia, que el buen tiempo se los llevará a la playa, je je.
ResponderEliminarBienvenida a este humilde hogar.