Se escribe mucho en los
últimos años sobre lo postcolonial en las lenguas y, por extensión, sobre el
papel de la literatura en la salvaguarda de los idiomas minoritarios. Walter
Mignolo denomina gnosis al sistema
que permite elaborar una teoría autónoma de la manera en que, con estos idiomas,
las gentes piensan y se relacionan con el mundo.
Uno de estos es el gallego.
Curiosamente, en la Edad Media fue idioma culto para la corte castellana. Las cantigas,
por ejemplo, están escritas en él. Pero las alianzas que tomó la nobleza
gallega en las guerras dinásticas (de Trastámara y Beltraneja-Isabel) les hizo
quedar en el bando perdedor, por lo que fueron relegados de los ámbitos
centrales del poder, pasando así el gallego a lo doméstico. Será la
publicación de Cantares gallegos de
Rosalía de Castro, en 1863 (sin que sea consciente del esplendor medieval), la
que reinicie el auge del gallego como lengua culta, surgiendo de lo popular.
En esta línea se sitúa la
producción literaria de Manuel Rivas (1957), escrita ella en gallego, en la que
muestra un modo propio de ver la realidad, que puede resumirse en el uso de la
retranca como el modo de expresar lo propio sin oponerse frontalmente a lo
ajeno. Según estudia Isabel Castro-Vázquez es un modo de resilencia, que
desemboca en re-existencia. Rivas realiza ecología del lenguaje. Se convierte,
con ello, en alguien con peso.
Y lo hace de un modo
altamente cualificado. El último día de
Terranova (2016) es un mosaico del panorama cultural gallego español y
argentino de los dos últimos tercios del siglo XX. Pone a prueba los
conocimientos de cualquiera que lo lea (dejando entrever que no le supone mayor
esfuerzo). Personajes, poesía, lenguaje, frustraciones, librerías, sueños… Es
la ficción de la realidad cuando la realidad necesita ficción.
[Salud. A la espera de que
la vida transcurra por sus cauces].
Me gusta bastante la literatura que escribe Manuel Rivas (menos sus artículos que son muy predecibles). Sin embargo esta novela no la he leído, así que poco puedo añadir salvo que es posible que la lea.
ResponderEliminarUn abrazo!
Creo que te gustará, Laura, si es así.
EliminarQue lo disfrutes.
Yo sí la he leído. La verdad que muestra una cultura extensa y, según dices, una intención determinada de escribir en gallego.
ResponderEliminarSaludos.
Pues coincidimos, Anónimo, entonces.
EliminarSaludos.
No la conozco esa novela pero me parece muy interesante.
ResponderEliminarSobre esa evolución y/o desaparición de las lenguas minoritarias y el escribir en ellas, supongo que como todo va acompañado con frecuencia de don beneficio y escribir en lenguas minoritarias no es rentable para las editoriales ni para los escritores que quieren vender sus libros al mayor número de lectores, así que hacerlo al final roza en el idealismo y en la defensa de la lengua en la que uno se siente bien escribiendo, es triste darse cuenta de que todo siempre gira alrededor de lo económico.
Un saludo
Ocurre con demasiada frecuencia, Conxita, lo que comentas de don dinero. En este caso, curiosamente, se mantiene en sus trece (aunque luego es muy traducido).
EliminarSaludos.
La mitología gallega forma parte del estilo de Manuel Rivas, que desde lo local consigue llegar a lo universal. Como escritor es insólito, va a su aire, no sigue modas ni tendencias y ahí está: todo lo que publica en cuanto menos, interesante. Yo llevo veinte años leyéndolo y no me canso. Además, de los pocos autores contemporáneos que ha conseguido cierta unanimidad en torno a sus cuentos, que se han leído, vendido y adaptado incluso al cine. Eso sí, me parecen imposibles de imitar.
ResponderEliminarSaludos.
Muy de acuerdo contigo, Gerardo. Es una literatura singular, fuera de modas. Sin duda, acerca Galicia a mucha gente.
EliminarSaludos.
No la he leído, no sé si me interesa esa temática. Aunque la verdad, leyendo el comentario de arriba me ha "abierto el apetito".
ResponderEliminarBesos, Ignacio.
En fin, Celia, es cuestión de echar una ojeada y si no nos gusta, pues lo dejamos, ¿no?
EliminarIgualmente, besos.
Manuel Rivas es un hombre de culto por estas tierras jaja yo vivo en Galicia, no sé si te lo había comentado- y no solo como escritor también como guionista Jose Luis Cuerda ha llevado al cien varios de sus guiones que por cierto merencen mucho la pena, la lengua de las mariposas y otra que está muy bien ¡hay motivo! este libro me lo apunto , mil gracias!
ResponderEliminarMás besos y sigo escalando!
; )