
Se acerca el mes de mayo, y con él el festival de Eurovisión, y con él el recuerdo de aquella famosa tonada que nos llevó al éxito: La la la. (Si pensabas que esto iba del Chiki-chiki, que por otra parte no me disgusta, puedes dejar de leer).
Hoy quiero hacer una versión de aquel estribillo y cambiar a: Le le le. El “le” que por estas tierras, no sé si también por otras, se nos escapa con facilidad. Y me incluyo, uno está tan acostumbrado a oírlo que lo dice sin querer.
En mi caso, la convivencia con criaturas no burgalesas me llevó a percatarme de la confusión. A cada “pásameLE” que yo profería le seguía una coñita más o menos insidiosa que me llevó a tener cuidado con mis palabras. Este es el propósito de esta entrada, ayudar a identificar un error, en ningún caso ofender.
Paseaba yo ayer por las calles de esta ciudad cuando reparé en un cartel en la puerta de un comercio, se trataba de promocionar las compras para el día de la madre, representaba una hoja de libreta con anotaciones tal que así:
Domingo "día de la madre":
- Ir a comer con mamá
- Llevar regalo
- ComprarLE en “X” (letra que siempre utiliza mi madre, ya que de progenitoras va el asunto, para sustituir algo que no viene a cuento decir)
Y claro, mi ojo avizor para estas cosas, otro día hablaremos del tema, me hizo ver el “LE” en rojo pasión, negrita y mayúsculas. ComprarLO, objeto o complemento directo. Si decimos la frase de esta forma: “Comprar-SE-LO a mamá” lo vemos claro.
“Le”, “te”, “se” indican complemento indirecto, quién sufre/soporta la acción. En este caso, mamá soporta (con alegría) el regalo, con lo que “a mamá /para mamá” puede ser sustituido por “le”.
“Lo” se refiere al complemento directo, qué es lo que se compra. En este caso, el regalo puede ser sustituido por “lo”.
La forma utilizada en la publicidad podría ser correcta si hubiera un objeto directo que se supusiera, algo así como:
“Comprarle (el regalo a mamá) en X”
Pero el enunciado hace más bien pensar que no, la sucesión de “llevar regalo” y “comprarLE” parece indicar que ese “le” está sustituyendo a “regalo” (y si no es así se peca de falta de claridad).
Tengo bastante miedo a decir y a escribir cosas de forma incorrecta; a veces la prisa me hace cometer errores y tiendo a poner tildes hasta en las consonantes, pero cuando escribo estas entradas paso varias veces el corrector y tengo siempre el DRAE a mano. Y puedo equivocarme, como todo el mundo.
Quiero decir que si uno va a publicar o a imprimir para su difusión un texto debe ser cuidadoso, debe repasar y comprobar la corrección de lo escrito o se arriesga a que lo lea una chinche y cuelgue una entrada en su bitácora.
“Si me encontraRÍA con ella, LA diría que no me importa”, pensarán algunos. Otro día nos metemos en ese jardín.
PD:Como no se me ocurría una imagen para ilustrar la entrada he puesto la foto del padre Emilio, que siempre es de agradecer.