Hace noventa años, Ramón Segarra Vaqué, en un pequeño artículo titulado Sport Pedantería, con cierto tono jocoso escribió: «La juventud de nuestra graciosa era todo lo resuelve con los pies […] La futura raza humana tendrá la cabeza muy chiquitita y las extremidades inferiores muy grandes… Y calzará herraduras». Se estaba extendiendo el footall y nacían clubes y aficiones.
Lo nuestro, sin embargo, no va de patadas a un objeto rodante. La Recolectora se arrellana cómodamente en las sillas de su casa redonda cada quince días y se dedica a comentar y discutir sobre el libro que en esos días tienen entre manos sus componentes. Esta temporada ‒de octubre a junio, como colegiales‒, por motivos inesperados, hemos dejado alguna sesión en blanco, pero aun así, palabra a palabra, hemos entrado en catorce historias a través de estos títulos:
El informe de Brodeck, de Philippe Claudel
Persépolis, de Marjane Satrapi
La pasión según G. H., de Clarice Lispector
Hacia la boda, de John Berger
El rey Lear, de William Shakespeare
Al morir Don Quijote, de Andrés Trapiello
La balada de Iza, de Magda Szabó
Adversarios admirables, de Olga Guirao
Cuentos de los días raros, de José María Merino
Bueno días, tristeza, de François Sagan
La muerte en Venecia, de Thomas Mann
Climas, de André Maurois
Memorias de un solterón, de Emilia Pardo Bazán
Y, según acostumbramos cada año, hemos gozado de un encuentro directo con gente que escribe; en este caso, con siete integrantes de la escuela de escritores de Burgos.
Para terminar cada sesión, al calor de las llamas del hogar (en invierno) y al frescor de la sombra del roble (en primavera), leemos en común en alto textos de Farugh Farrokhizad, Carlos Marzal, Wislawa Szymborska, Ortega y Gasset, Ernestina de Champourcin, Aníbal Núñez, Clarice Lispector, Ángel Crespo, Pirandello, María Victoria Atencia...
Después, un animado refrigerio en la cafetería de al lado.
Pues enhorabuena por ese club que usa del pensamiento y abunda en la cultura. Un abrazo a todos
ResponderEliminarLa lectura, buena excusa para la reunión, para compartir, para opinar.
ResponderEliminarSaludos Lavela.
Ese club tiene lista de espera, ¡qué envidia!
ResponderEliminarFelicitarte por haber conseguido meter un cómic entre las lecturas escogidas, muy pocos se atreven con ellos en un club de lectura.
Gracias, Esther, extensivas de todo el club. Saludos.
ResponderEliminarSí que es una excelente excusa, Elena. Además, con los años, va creando cuerpo.
ResponderEliminarSaludos a ti. Buen día.
Gracias, Ayla. Además, el cómic Persépolis estuvo acompañado de una charla con un creador de este medio (en unión con los otros dos clubes de la Biblioteca).
ResponderEliminarExcelente.
ResponderEliminarGracias, Pedro.
ResponderEliminarVais a tener que escribir un libro sobre escribir un libro. Enhorabuena.
ResponderEliminarGracias, ebge, todo se andará.
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