viernes, 27 de febrero de 2009
A LAS 7 QUEDAMOS... EN LA BIBLIOTECA NACIONAL.
jueves, 26 de febrero de 2009
Entre papel y pucheros: Rosquillas
Ingredientes:
* 1 huevo
* 1 taza de café de aceite (mitad girasol, mitad de oliva) frito previamente con un concho de limón --> es lo que se denomina aromatizar el aceite.
* Taza y media de azúcar
* 1 sobre de Arnisel o más concretamente de sosa El Tigre, de venta en supermercados de la cadena Simply. No es que nos vayamos a envenenar (sirve para hacer gaseosa) sino que necesitamos una ayudita química para favorecer el engorde de la rosquilla en la fritura y su posterior conservación.
* 2 cucharadas pequeñas de levadura en polvo
* 1 taza de leche
* 1 taza de anís
* Algo más de medio kilo de harina
* Aceite de girasol en abundancia para freír
El procedimiento es sencillo a más no poder: mezclar todos los ingredientes hasta formar una pasta moldeable que se nos despegue bien de los dedos. Conviene, para hacer las formas, cubrir una mesa o encimera con harina, al igual que nuestras manos. Si no lo hacemos corremos el riesgo de ver pegotes por toda la cocina.
La sartén debe tener suficiente aceite de girasol para que cubra por entero las rosquillas. Y el aceite estar bien caliente, pero no quemando. Así, igual animados por una copilla de anís extra, vamos llenando nuestra cocina de ese olor de la repostería casera de toda la vida. Porque esta es una receta original del pueblo burgalés de La Aguilera.
Se conservan, en parte gracias al arnisel y la levadura, muy bien durante días, no quedándose nada duras. Aconsejo, para que veáis que es verdad, consumir un día después de su fritura. ¡Están mejor que recién hechas!
La semana que viene cambiaremos totalmente de tercio con otros platos menos dulces, pero no por ello menos sabrosos. Descanso de momento para los paladares más golosos... aunque siempre me acordaré de vosotros en sucesivos post.
miércoles, 25 de febrero de 2009
YA TENEMOS GANADORES
Con esta iniciativa LEA (Librerías Especializadas Asociadas) pretenden promocionar y fomentar la lectura y el uso de bibliotecas y librerías.
Si entráis en la página podéis ver los videos ganadores, que están colgados en youtube bueno y también los que no lo son.
Os animo a verlos, hay algunos muy ingeniosos, imaginación al poder.
Fuentes: correo publicado por Jesús M. Pinto Varela en Iwetel
martes, 24 de febrero de 2009
La máquina del tiempo
¿Os imagináis poder tener una maquina del tiempo, y viajar en el mismo para conocer alguna de esas bibliotecas, que tenemos mitificadas en nuestra imaginación?
lunes, 23 de febrero de 2009
Él y Ella
Es indudable que existen diferencias entre los hombres y las mujeres. Desde hace varios años abundan las charlas, escritos, seminarios, etc. que hablan de las peculiaridades de la escritura femenina. Ha surgido como una extensión, casi natural, de la obligada reivindicación que necesitaba el mundo de las mujeres en una sociedad en la que el Poder es detentado mayoritariamente por los hombres, los cuales imponen, además, las pautas culturales. También como una extensión, casi natural, esta actividad divulgadora crea un mundo económico –las charlas se pagan, las personas cobran– que, en buena medida, se alimenta a sí mismo, diluyendo lo que en un principio eran objetivos nítidos.
Nuestra pregunta es: ¿también aquí somos diferentes mujeres y hombres? Si nos guiamos por el ambiente cultural, parece que sí. Pero no todo es tan claro. Hay escritoras, caso de Enriqueta Antolín (según cuenta en su aportación a La Biblioteca del Naúfrago), que se niegan a asistir como ponentes a este tipo de charlas o seminarios, puesto que, al igual que opinamos en este barco, creen que el espacio literario es un lugar transformista. Lo mismo que pueden ser la pintura, la música o el mar.
Y para ilustrar lo que decimos, vaya un botón. La misma Enriqueta rememora «una curiosa experiencia que se llevó a cabo en las páginas de Babelia, el suplemento cultural de El País». Se encargó a escritores y escritoras que enviaran un relato breve, el cual se publicaría sin firma con su permiso, pero ocultándoles el propósito de lo que se pensaba hacer. Al publicarlos se pidió a quienes los leyeran que dijeran si creían que estaba escrito por un hombre o una mujer, y que lo razonaran. Las contestaciones no se hicieron esperar y, por supuesto, tampoco las explicaciones –«Sin ninguna duda, esto es de…»– correspondientes. Pues no, en muchos casos, eso no era de…, era de…
viernes, 20 de febrero de 2009
BIBLIOCARNAVAL
Bien, sea como sea, disfrutad de la vida en cualquier circustancia y usad la imaginación.
Ah! que se me olvidaba, que Paz y amor... y los libros para el salón.
jueves, 19 de febrero de 2009
Entre papel y pucheros: Magdalenas (II)
Se separan las claras las yemas. Juntamos las yemas con el azúcar hasta que quede una mezcla ligera y espumosa. Añadimos el zumo de limón (sin pepitas, gracias) y la mantequilla, derretida previamente en el microondas. Removemos bien y vamos añadiendo por último la harina poco a poco.
A la pasta anterior resultado de la amalgama de ingredientes añadimos las claras. Veremos que disminuye su espesor y aumenta el volumen imperceptiblemente. Llenamos moldes con la masa resultante y les cocemos en el horno a unos 160 º C. No como en la receta original, que indica a 200 º C y me salieron magdalenas cubanas.
En fin, mucho resquemor tengo a estas puñeteras. Son las favoritas de mi pareja y de vez en cuando le obsequio con una docena (no salen muchas más, lo siento). Hace una semana me quedaron fatal: morenas de rayos uva, a medio hacer por dentro y planas. De sabor ricas, pero de aspecto incomibles. Para mí que se juntaron unos huevos petardos, una mantequilla con grumitos indisolubles y un zumo de limón con más pepitas que ni sé. Eso sí, no me desanimé e hice otra tanda que quedó estupenda.
Cada cual que asuma sus riesgos. Yo haría las del post de hace dos semanas. Eso sí, sin Márquez al lado por si las brujas andan entre fogones y nos fastidian el invento.
miércoles, 18 de febrero de 2009
Fenómeno vampiro
Coincidentes en espacio/tiempo, guardan similitudes muy sospechosas: ambas juegan con la seducción por lo prohibido, con personajes que tienen poderes mentales y con la convivencia normalizada entre ambas especies. Aunque el punto de partida sea este, la motivación de los libros es mostrar una historia de amor a la vieja usanza (que me les he leido TODOS). Mientras tanto, la serie nos muestra un sur profundo, anclado todavía en la lejana guerra de secesión y donde el pasatiempo principal es el sexo acompañado de varias botellas de cerveza. Vamos, que la clasificación es para mayores de 18 bajo riesgo de trauma. Aunque no debemos olvidar que la edulcoración excesiva de los protagonistas de Crepúsculo también sienta mal a los que no vivimos en los mundos de yupi.
Extremos opuestos pero con el mismo punto de partida. Mucho me temo que su triunfo no es debido a la calidad de sus argumentos, sino a una nueva ola de veneración por un ser que, al parecer, deseamos que exista (menudo miedito). Eso sí, por un día me gustaría ser fuerte, guapa (todos los vampiros son guapos, que lo sepáis) y pasearme con aire de suficiencia por la calle. Aunque el precio fuera beber una botellita de sangre sintética japonesa llamada True Blood.
Felices fantasías. No tan felices si se os ocurre ver un capítulo de la serie...
martes, 17 de febrero de 2009
EL QUIJOTE SIEMPRE EN LA BIBLIOTECA
lunes, 16 de febrero de 2009
Bibliotecas y Violencia
A primeros de este mes, el auxiliar que atendía la biblioteca del Cerro de Reyes, en Badajoz, realizaba una actividad infantil, cuando un grupo desde el exterior comenzó a lanzar objetos contra las ventanas. Asustadas las criaturas, el auxiliar salió a llamar la atención a los gamberros de fuera. En ese momento comenzaron a apalearlo, propinándole patadas y puñetazos, e, incluso le agredieron con una barra. El bibliotecario consiguió zafarse y refugiarse dentro, quedando herido levemente, con hemorragia en un oído y contusiones en el cuerpo.
Por supuesto, se niega a volver al lugar, como ya lo habían hecho en ocasiones anteriores otras/os compañeras/os de oficio. La causa, la misma: acoso y amenazas por un grupo del barrio. La solución de la concejala de cultura de Badajoz, en un primer momento, fue el cierre indefinido de la biblioteca, porque –dice– no encuentra a nadie que quiera ir a trabajar allí. ¿Será esa la solución adecuada? ¿Cómo juzgamos los hechos: con la cabeza o con el corazón?
PD: al parecer, sometida la decisión de cierre a duras críticas, la Concejalía afirma que el barrio no quedará sin biblioteca y se buscará la solución adecuada.
http://www.hoy.es/20090124/badajoz/cierra-biblioteca-municipal-cerro-20090124.html
sábado, 14 de febrero de 2009
San valentín... de capa caida
¡Feliz día en buena compañía!
viernes, 13 de febrero de 2009
Raíles: tecnología humanitaria
Estamos perfeccionando un sistema de raíles para bibliotecas, en el que las pequeñas vagonetas portadoras de libros y demás documentos se deslizarán, sobre raíles insonoros, con mando a distancia (la que tienen nuestros brazos). Solo nos queda ultimar el sistema para que coloque automáticamente (con CDU, por supuesto) el material en su sitio (es decir, que nos encuentre con inspiración en el momento de ver las letras y números). Se acabaron los odiosos carritos, tan indiscretos ellos.
Nos hemos inspirado en el sistema empleado por la centenaria librería Lello & Irmao de Oporto (en la fotografía, fijarse en el suelo). Dicen que es la más bella del mundo. (Claro, que en Portugal, ya se sabe, todo es lo más de lo más.) Por supuesto que hay un vídeo sobre ella en internet (no es que sea muy allá, pero, si alguien lo desea, le podemos enviar uno más decente).
http://www.youtube.com/watch?v=DwpuTU-SWWI
Nos los van a quitar de las manos.
jueves, 12 de febrero de 2009
Entre papel y pucheros: Trufas
Ingredientes: 150 gr de chocolate negro Valor de cobertura, 150 gr de chocolate con leche Nestlé, medio brick de nata de los pequeños Pascual, 2 yemas de huevo. Avellanas para añadir y fideos de chocolate también Valor para rebozar.
Se funde todo el chocolate al baño maría, cuidando que no queden grumos. Añadimos la nata, removiendo hasta quedar una pasta ligera. El efecto nata producirá un pegote al principio, no asustarse. Añadimos a la mezcla anterior dos yemas de huevo y mezclamos con energía. Ya tenemos la pasta base. Cogemos un puñadito de avellanas y las machacamos con lo que tengamos más a mano: martillo, mortero, zapatilla de andar por casa... El polvito con trocitos resultante lo unimos a la pasta base. Sólo queda dejar enfriar a temperatura ambiente (cosa no muy difícil en esta época del año) hasta que se moldee correctamente.
Por último hacemos la forma típica de albondiguillas a mano y rebozamos en fideos de chocolate. Guardar en el congelador por lo menos una tarde hasta que estén duritas.
Por raro que pueda parecer, tanto chocolate no empalaga. Al estar heladas, conviene sacarlas del congelador diez minutos antes de consumir para evitar denteras. No van a estar heladas por dentro debido a la cantidad de nata usada. La receta original aconsejaba 6 cucharadas soperas únicamente y quedaban algo peñasco.
Ya para terminar, confesar que esta semana he tenido un desengaño culinario con una caprichosa receta de magdalenas que colgaré en la siguiente edición de este humilde recetario. Para recetas y anécdotas curiosas relacionadas con la cocina diplomática, recomiendo encarecidamente un libro sorprendente de Carmen y Gervasio Posadas: Hoy caviar, mañana sardinas.
Y pasado, regálate unas trufas por San Valentín ;)
Imagen del libro sacada de: www.libreriaelarboldelasletras.es
miércoles, 11 de febrero de 2009
MUSEO FADRIQUE DE BASILEA
Fuente: Diario de Burgos
martes, 10 de febrero de 2009
lunes, 9 de febrero de 2009
Diccionario Biográfico Español ¿Sabes de alguien importante?
El resultado ha sido una obra con más de cuarenta mil entradas. En espera de hallar editorial que lo saque a la luz de forma impresa, se ha creado en la Academia de la Historia un Centro Digital de Estudios Biográficos, que pone a disposición pública los datos mínimos de las personas biografiadas: fecha y lugar de nacimiento y muerte, ámbito geográfico de actuación, etiquetas… Todo ello puede verse en http://www.rah.es/cdeb.htm (pinchando en Base de Datos del Centro…).
Lo interesante del asunto para la ciudadanía es que tendrá la opción de acceder a contenidos culturales en línea, al tiempo que podrá contribuir a la mejora del proyecto a través de sus comentarios y aportaciones, generando una sindicación de contenidos.
Es decir, si tenéis información de personajes interesantes, podéis mirar a ver si están y, de lo contrario, sugerir su inclusión. O, en su caso, completar la biografía.
¿Se os ocurre alguien?
viernes, 6 de febrero de 2009
AL CALORCITO DE LAS LETRAS... EL HOGAR DEL PENSIONISTA, DEL AMA DE CASA, DEL ESTUDIANTE...
jueves, 5 de febrero de 2009
Entre papel y pucheros: Magdalenas (I)
- 4 huevos
- 6 tazas pequeñas de azúcar (las tazas pueden ser las de café)
- 4 tazas pequeñas de leche
- 4 tazas pequeñas de aceite
- 12 tazas pequeñas de harina sin llenar del todo
- 2 cucharaditas de levadura
Mezclamos los huevos con el azúcar hasta que cojan volumen. Posteriormente añadimos el resto de ingredientes, removiendo poco a poco y acabando dando un tute con la batidora para que no queden grumitos en la masa. Cogemos los moldes de papel y lo llenamos con la masa hasta 3/4. Metemos las magdalenas al horno a unos 160-180º C y a ser posible, en modo calor uniforme o ventilador. Si no, pues calor por arriba y por abajo. Cuando estén doraditas, las sacamos del horno y dejamos enfriar en una bandejita cubiertas por un trapo de algodón blanco.
No sé si os quedarán con copete, porque son muy caprichosas en sus formas. Aunque dependerá de vuestra personalidad, ya que dicen que los platos se parecen un poco al cocinero. ¡Suerte con ellas!
miércoles, 4 de febrero de 2009
Trabajar por la tarde
Son las 7:30. Aprovechando que mi vejiga pide vaciarse, me levanto y tomo un vaso de leche con galletas. Como no es bueno tanto esfuerzo a esas horas de panaderos, retorno a la cama con el estómago lleno y calentito, saboreando el intenso placer de una siesta post-desayuno. El dormir se ve alterado por los rutinarios ruidos de esa gente, que, en la lejanía, madruga para ir a trabajar. No hago caso. Me arrebujo en la manta esperando volverme sorda. Y realmente debo estarlo, porque ayer ni me enteré que se saltaron los plomos y dejaron de funcionar todos los aparatos eléctricos de mi hogar. Soy una neandertal en potencia. ¡Fuera la tecnología que impida dormir!
A las 10:30 me abruma la culpa por ser la reina de las vagas y abro un ojo. Es muy de día. Jope, me queda una hora hasta tenerme que poner a cocinar, tiempo que dedico a ventilar la casa. En el único reducto sin aire gélido (la cocina) me sumerjo en el mundo de vampiros y licántropos, personas que no tienen que prepararse su comida porque con cazar un par de alces lo tienen resuelto. Fijo que estarán llenitos de colesterol de tanta proteína, no como yo, que comeré pasta vegetal para mantenerme estupenda. Me preparo la pitanza medio zombi, como una Arguiñana autómata. Mientras tanto escucho que una iglesia del románico asturiano tiene un ecosistema en su cara norte. Hablando en plata, que el musgo la coloniza de puro abandono. Se exigen obras inmediatas para paliar el deterioro de sus frescos. Las piedras siempre me han resultado simpáticas, pero si es cuestión de prioridades, prefiero comerme mi carne guisada a un trozo de líquen con granito. Y más con esta crisis.
Cuando me visto, miro mi cara y pienso qué fácil sería hacer como en la vitrocerámica: manita de limpiador y luego si hay alguna impureza, rasqueta al canto. Una pena que los arañazos no estén de moda. Aun así, me veo más guapa que el resto de gente que entra en el autobús. Qué buen ojo tengo.
Mientras viajo, leo un trozo del último libro que se ha leido mi madre "El canalla sentimental" de Jaime Bayly. Me sale una cita en que la que el protagonista se mete en la cama con varias capas de ropa vieja (y sucia, para más inri). Además, mea las plantas que cuida con mimo su novio. ¿Llegaré algún día a esto? Quizá, porque ya voy medio desarrapada por la calle, loca estoy un rato y llevo diciendo chorradas todo el post. Será por el rollo este de los carnés, que me hace vivir en la irrealidad.
¡Una sonrisa y mucho ánimo para todos! :)
Foto de www.imaginaria.com.ar
martes, 3 de febrero de 2009
Las túnicas de colores
Al cabo de varias lunas el emperador decidió que debía construirse otro templo pues el acudir a aprender cosas y pasar un rato de forma agradable era una costumbre cada vez más extendida. A las personas que iban a este segundo templo se les entregaba una túnica de color verde. El emperador decretó también que las personas con túnica verde pudieran entrar al templo de las túnicas amarillas y que las personas con túnica amarilla pudieran entrar al templo de las túnicas verdes.
Así pasó mucho tiempo, los habitantes de aquel país se acostumbraron a acudir a los dos templos indistintamente, según sus necesidades en cada momento. Por eso el emperador pensó que sería bueno que todos llevaran una túnica de un único color, así que dio a los dos templos la orden de tejer y confeccionar túnicas de color rojo que sustituirían a las túnicas amarillas y verdes.
Como el número de túnicas que había que hacer era grande, en el templo verde pensaron que sería bueno permitir la entrada a las personas independientemente del color de su túnica mientras tejían y confeccionaban las rojas. Además, pensaron que sería bueno hacer túnicas nuevas para todas las personas que se las pidieran, sin mirar el color de la antigua.
Sin embargo, en el templo amarillo decidieron que sólo dejarían entrar a las personas con túnica amarilla y que sólo confeccionarían nuevas túnicas para aquellos que la tuvieran amarilla. Todos aquellos que tenían túnica verde eran enviados al templo verde, muchos no entendían por qué, ya que hacía tanto que se podía entrar igualmente en los dos templos que habían olvidado que los colores eran distintos.
Cuando el emperador se enteró se enfureció. El había pensado en ese cambio con el único fin de favorecer a los habitantes de aquel país, no para entorpecerles el aprender cosas y pasar un rato de forma agradable. Durante mucho tiempo estuvo pensando en qué castigo sería el adecuado para los encargados del templo amarillo y en la recompensa para los encargados del templo verde.
Después de meditar mucho, el sabio emperador llegó a la conclusión de que el mejor castigo para los encargados del templo amarillo era no castigarles ni decirles nada y dejar que siguieran como eran. Asimismo la mejor recompensa para los encargados del templo verde era que siguieran pensando en quienes acudían al templo antes que en ellos mismos. Los habitantes de su país eran inteligentes y sabrían elegir.
FINAL FELIZ:
Como los encargados del templo amarillo comprendieron la importancia de la comodidad de las personas que acudían a los templos para aprender cosas y pasar un rato agradable, terminaron haciendo como los encargados del templo verde.
Y el sentido común se impuso en aquella ocasión.
lunes, 2 de febrero de 2009
Lecturas Obreras (III). Lectura colectiva. El Apostolado
Juan Díaz del Moral (1870-1948) fue testigo de aquel ambiente. Su curiosidad le hizo ahondar en el conocimiento de los hechos y, con lo adquirido, publicó un libro en 1929 (Historia de las agitaciones campesinas andaluzas) que nos deja estas descripciones: «…no olvidaremos nunca el asombroso espectáculo. En el campo, en los albergues y caseríos, dondequiera que se reunían campesinos, a las habituales regocijadas conversaciones de variados asuntos había sucedido un tema único, tratado siempre con seriedad y fervor: la cuestión social. En los descansos del trabajo (los cigarros) durante el día, y por la noche, después de la cena, el más instruido leía en voz alta folletos o periódicos, que los demás escuchaban con gran atención […] ¡Cómo! ¡Pero si todo aquello era la verdad pura, que ellos habían sentido toda su vida, aunque no acertaran a expresarla! Se leía siempre; la curiosidad y el afán de aprender eran insaciables; hasta de camino, cabalgando en caballerías, con las riendas o cabestros abandonados, se veían campesinos leyendo; en las alforjas, con la comida, iba siempre algún folleto.»
Se leían periódicos anarquistas y anticlericales: Tierra y Libertad, El Corsario, La Conciencia Libre, El Productor, La Anarquía, El Rebelde… o folletos y libros: En el café, Entre campesinos, Las ruinas de Palmira, El 1.º de Mayo, La conquista del pan, ¡Huelga de vientres!… Los textos decían que toda persona, por el hecho de nacer, tiene derecho al banquete de la vida y que nadie es digno de acumular riquezas con el trabajo ajeno. Se hablaba, además, del respecto a la mujer y la igualdad de sexos en el hogar y en la sociedad; el amor a la naturaleza y a la cultura; la lucha contra el alcoholismo, el tabaco y los juegos de azar; el control de natalidad; los abusos del clero y del ejército…
Los hombres y mujeres que propagaban estas lecturas eran apóstoles de La Idea. Finalmente –testifica el notario de Bujalance– se creó un ambiente que consiguió en unos años lo que la Iglesia no había logrado en casi dos siglos: terminar con las rencillas entre pueblos vecinos y entre la misma gente del lugar.