Este es el título de la última obra de Francisco Umbral, que saldrá a la calle esta semana.
No os asustéis, que no ha resucitado entre los muertos, sino que tras su muerte aparecieron más de 300 poemas entre sus cosas, unos escritos a máquina y otros de su puño y letra, donde expresa sus pensamientos diarios sobre los temas actuales.
No os asustéis, que no ha resucitado entre los muertos, sino que tras su muerte aparecieron más de 300 poemas entre sus cosas, unos escritos a máquina y otros de su puño y letra, donde expresa sus pensamientos diarios sobre los temas actuales.
De estos 300 poemas, García-Posada y María España seleccionaron 126, y a ellos le sumaron el único poemario que el gran prosista y maestro de la metáfora escribió en su vida Crímenes y baladas, publicado en 1981 y de ello surge esta magnífica obra.
Este es el comienzo de la obra:
«Voy a poner primero
donde empieza este libro,
un cuchillo de tiempo que he visto en la cocina,
voy a poner delante, porque el lector lo use,
un bruñido abrecartas, pulcro de asesinatos».
Buscando información sobre este estupendo escritor, me he encontrado con esta página:
http://www.franciscoumbral.com/ donde se pueden consultar todos los artículos por él publicados en El País, El Mundo, El Cultural, Hermano Lobo…
Datos sobre Francisco Umbral (mayo 1935- agosto 2007):
Francisco comenzó tarde su formación escolar, a los diez años, pero con once dejó sus estudios - mejor dicho, le echaron - para no volver a retomarlos de forma oficial
Estudiante autodidacta, la literatura para él se convirtió en una verdadera maestra.
Sus primeros pasos literarios se vieron publicados en la revista Cisne, del S.E.U.
A comienzos del año 61 se instala en Madrid, donde desarrolla su intensa actividad periodística y literaria. Como escritor ha forjado su faceta en distintos géneros como novela, ensayos, poesía, cuentos, biografías, e incluso teatro, pero en este último género no ha tenido éxito.
Casado con la fotógrafa María España Suárez Garrido en 1959, tuvo un hijo - Pincho - que falleció con tan solo seis años de leucemia. Este acontecimiento marcó enormemente su vida, como se demuestra en su obra 'Mortal y Rosa' (1975), considerada además por los críticos como una de las obras literarias más importantes de la segunda mitad del siglo XX.
«Voy a poner primero
donde empieza este libro,
un cuchillo de tiempo que he visto en la cocina,
voy a poner delante, porque el lector lo use,
un bruñido abrecartas, pulcro de asesinatos».
Buscando información sobre este estupendo escritor, me he encontrado con esta página:
http://www.franciscoumbral.com/ donde se pueden consultar todos los artículos por él publicados en El País, El Mundo, El Cultural, Hermano Lobo…
Datos sobre Francisco Umbral (mayo 1935- agosto 2007):
Francisco comenzó tarde su formación escolar, a los diez años, pero con once dejó sus estudios - mejor dicho, le echaron - para no volver a retomarlos de forma oficial
Estudiante autodidacta, la literatura para él se convirtió en una verdadera maestra.
Sus primeros pasos literarios se vieron publicados en la revista Cisne, del S.E.U.
A comienzos del año 61 se instala en Madrid, donde desarrolla su intensa actividad periodística y literaria. Como escritor ha forjado su faceta en distintos géneros como novela, ensayos, poesía, cuentos, biografías, e incluso teatro, pero en este último género no ha tenido éxito.
Casado con la fotógrafa María España Suárez Garrido en 1959, tuvo un hijo - Pincho - que falleció con tan solo seis años de leucemia. Este acontecimiento marcó enormemente su vida, como se demuestra en su obra 'Mortal y Rosa' (1975), considerada además por los críticos como una de las obras literarias más importantes de la segunda mitad del siglo XX.
Umbral ha recibido numerosos premios por sus obras.
Entre los que destacan el Premio Nadal en 1976 por su obra 'Las Ninfas' y fue finalista del Premio Planeta en 1985 con 'Pío XII, la escolta mora y un general sin un ojo'. En el 90 le concedieron el Premio Antonio Machado con su narración corta 'Tatuaje'.
En 1996 recibe el Premio Príncipe de Asturias de las Letras y un año después el Fernando Lara por 'La forja de un ladrón'. El 97 fue un año exitoso porque el Ministerio de Cultura le otorgó el Premio Nacional de las Letras por el conjunto de su obra, la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid, y el León Felipe a la Libertad de Expresión.
El 2000, obtuvo el Premio Cervantes, uno de los más prestigiosos de las letras hispanas. Y hasta el momento el Premio Periodismo Mesoneros Romanos, de 2003, es el último premio obtenido.
Umbral y Valle, ¡vaya dos plumas! Inicio y fin de siglo. Casi todo el siglo veinte.
ResponderEliminarTengo que decir que este artículo no ha sido discurrido por mi, si no por NADIA y me ha gustado mucho pequeñuela, bien hecho... es que este hombre era un "figura" por su personalidad, manera de vivir y escribir, me gusta!!!
ResponderEliminarSi; que pena que arrastre tantos sanbenitos.
ResponderEliminarSambenitos, perdón.
ResponderEliminarUmbral, genio y figura .... todo un personaje, en fin. Al margen de las polémicas que suscitó en su vida, hay que reconocerle la capacidad literaria que tuvo y su espíritu libre (e indomable). Él mismo dijo: "No entiendo cuándo he vivido, habiendo escrito tanto. Pero lo cierto es que he vivido, y mucho, y todo está escrito"Olé por él, ya quisiéramos muchos....
ResponderEliminarqué emoción!!!! un montón de hermanos conventuales de regreso de su retiro... esto es indescriptible, la emoción embarga todo mi redondo ser... ayyyy!!!!
ResponderEliminarY yo estoy aquí para hablar de "nuestro" blog... jejejeje XDD
Ya sabe madre, con el buen tiempo salimos de nuestras celdas cual lagartijillas al sol y retomamos las actividades lúdicas y festivas ¡qué bonica es la primavera, supe! XDDDDD
ResponderEliminaruauuuuuuu!!!!! vaya juerga!!!! XDDDD
ResponderEliminarSiempre leemos los post aunque no siempre hagamos comentarios (...no estás sooolaaa, alguien te aamaa en la ciudaaad...)(musica de Miguel Rios y eso).
ResponderEliminar:******
ResponderEliminarA mi Umbral siempre me dió miedo, ahora ya pasados los años el miedo se ha convertido en respeto y admiración.
ResponderEliminarQué decir que la alegría que una siente al ver el blog tan concurrido. Viva la primavera¡
El dato frívolo lo añado yo, y es que tenía un punto bastante atractivo (si no se le contrariaba)
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