Algunas bitácoras (hechosdehoy.com, otromadrig.org, coabdm, etc.) se hicieron eco en el pasado septiembre de una intervención inesperada que se produjo en la escalinata de la Biblioteca Nacional, el 11 de septiembre, durante los actos programados para la Noche en Blanco madrileña de este año. Una docena de integrantes del sindicato CNT, a quienes apoyó otra treintena que se había situado entre el público asistente, irrumpieron en el escenario a las diez de la noche para denunciar la situación de secuestro que está viviendo Marta, trabajadora de la empresa Indra, una de las empresas que subcontrata la Biblioteca Nacional para diferentes tareas. (Se calcula que son unas 400 personas las que trabajan en esa figura jurídica denominada cesión ilegal). Las subcontratas dejan en indefensión laboral a quienes trabajan en estas empresas; en teoría sólo tendrían que recibir órdenes de personal de la empresa, pero en la práctica suelen estar guiadas por funcionariado público del centro. Marta fue despedida sin previo aviso, por lo que denunció la situación y fue llevada a las instalaciones de lndra en Alcobendas, dejándola sin quehacer. A ella se han sumado Begoña y Sara, por parecidas denuncias.
Antonio Gamoneda −el poeta leonés− era uno de quienes tenían que intervenir en el acto, leyendo un poema de Miguel Hernández, y no dudó en expresar sus simpatías a los motivos de la interrupción −según podemos apreciar aquí−, declarando que, por encima de todo, la poesía del de Orihuela «escribe y canta desde el mundo del trabajo y desde la pobreza».
No hemos encontrado la forma de casar la igualdad que promueve la cultura con la jerarquización y privilegios de quienes la habitamos. Seguramente porque no lo pretendemos.
Salud.
Antonio Gamoneda −el poeta leonés− era uno de quienes tenían que intervenir en el acto, leyendo un poema de Miguel Hernández, y no dudó en expresar sus simpatías a los motivos de la interrupción −según podemos apreciar aquí−, declarando que, por encima de todo, la poesía del de Orihuela «escribe y canta desde el mundo del trabajo y desde la pobreza».
No hemos encontrado la forma de casar la igualdad que promueve la cultura con la jerarquización y privilegios de quienes la habitamos. Seguramente porque no lo pretendemos.
Salud.
El problema es que esto va a ir a más.
ResponderEliminarEs verdad, Pedro, el privilegio se resiste a ser desposeído.
ResponderEliminarTremendo caso el que cuentas, y lo peor es que desde la justicia parece que se hace poco.
ResponderEliminarUn beso.
Esto de las cesiones no lo había oído. Para colmo hay ley del silencio.
ResponderEliminarUy,uy,uyyyyy!!!! la cosa está muy malita para los servidores públicos, palabro que gusta a no sé quien y que a mí me horripila, como tb funcionario, porque al fín y al cabo somos trabajadores por cuenta ajena como cualquier otro trabajador con la salvedad que prestamos un servicio, fundamental o no según lo mire no sé quien, si somos servidores es de la cultura.
ResponderEliminarAlgunos venderían su primogenitura por un plato de votos.
Majo Gamoneda, coherente y correcto. Me gusta.
ResponderEliminar¡Gracias por vuestra solidaridad!
ResponderEliminarContinuamos la lucha por nuestra readmisión.
Marta
Ya, Elena, no parece que sea un asunto que proporcione relumbrón a quien lo defiende.
ResponderEliminarUn beso.
La cosa viene de antiguo, egbe.
ResponderEliminarSí, Mafi, Gamoneda dio la talla en el momento. También quienes estuvieran a cargo de la organización del acto, al permitir la protesta.
ResponderEliminarDe nada, Marta. Esperamos que haya éxito.
ResponderEliminarPor supuesto todo nuestro apoyo para Marta y sus compañeros.
ResponderEliminarNo se porque me viene a la cabeza un viejo refrán castellano:
"cuando las barbas de tu vecino veas cortar..."
La Biblioteca Nacional prepara nuevos despidos... http://www.cnt.es/noticias/la-biblioteca-nacional-prepara-nuevos-despidos
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