Mientras camino a la biblioteca del barrio me
pregunto cuándo se sabe que una novela está terminada. No sé. Tal vez quien la
escribe tiene la percepción de que ya no puede dar más de sí en ese relato. O
tal vez es la historia que se está narrando la que de una u otra forma se
declara completa. O quizá suceden ambas cosas.
En estas ando ya entre las estanterías y me
he alargado hasta las de poesía -en el fondo de la
sala, la pobre-. Allí me encuentro
con libros que nadie ha llevado a casa y, de uno en uno, voy sacándolos, pues
me da cierta pena que no tengan una fecha en su papeleta de préstamo. Me pagan
con creces. El de hoy es un desconocido Antonio Hernández (1943), que publicó Lente de agua en 1990. La breve reseña
de la parte posterior define su poesía de fascinante y contagiosa, por no decir
admirable, ostentosa y esencial. Lo cierto es que la leo con el gusto de quien
toma unas patatas cocidas a fuego lento: “No han de ganar la honda luz del
tiempo / sino los hombres que poblaron sombras / hasta transfigurarlas: una
calle del aire / por el que siempre ya transitaría / con cristales y pétalos, /
ley de aquel que ha nacido para amar / y en el amor se daña”. Habla de nuestra
Historia.
Pero volvamos al inicio. ¿Cuándo una novela
está finalizada? Me refiero, claro está, a la que escribe quien no tiene
sujeción a las exigencias del mercado, quien no depende de los anticipos de las
editoriales. Es lo que quiero pensar de Javier Cercas y, en concreto, de Las leyes de la frontera, publicada en 2012. Según mi opinión, le sobrarían tranquilamente un centenar de páginas -tiene
casi 400-. No del final del libro, sino sobre todo de
la segunda parte. La agilidad de su prosa, el acierto de los ambientes, la
capacidad de resonancia que produce, parece quedar contrarrestada por la
reiteración de ciertos motivos -la diferencia entre
la persona y el personaje de su protagonista, fundamentalmente-,
cuya evitación podrían haber exprimido el texto y, en nuestra opinión, depurar
una historia redonda.
“La literatura es una actividad de
sacrificios [a las palabras]”, decía (más o menos) Flaubert.
[Salud. A la espera de que la Vida acerque
sacrificios a quienes gobiernan la res
publica].
Una cuestión interesante esa de preguntar cuándo se sabe que una novela está finalizada. Además, das una opinión concreta sobre "Las leyes de la frontera" (que no he leído).
ResponderEliminarSaludos.
La verdad, Anónimo, que es una novela legible. Tiene su enjundia formal y de contenido, aunque, a mi modo de ver, demasiado extensa.
EliminarSaludos.
La verdad, Anónimo, que es una novela legible. Tiene su enjundia formal y de contenido, aunque, a mi modo de ver, demasiado extensa.
ResponderEliminarSaludos.
Me ha parecido una preciosidad esa idea de dar una oportunidad en la ficha de préstamos a esos libros que no han sido escogidos, me parece de una gran sensibilidad.
ResponderEliminar¿Cuándo se acaba un libro? Por lo que he escuchado no es fácil decidir que un libro está acabado. Hay autores que se autoimponen finalizarlo y otros con más éxito tienen a las editoriales presionando con fechas de entregas que entonces igual resulta más fácil. Después lo que hacen con las novelas, yo pensaba que era decisión del escritor pero por lo que me contaron son los editores los que deciden sobre muchos aspectos, imagino que sobre la extensión también.
Besos
Gracias, Conxita, por las precisiones que haces sobre las novelas de escaparate, es decir, de quienes tienen un cierto éxito y tienen que sujetarse a las indicaciones editoriales.
EliminarBesos.
Los libros que no encuentran lectores/as... menudo tema, me da pena, son libros perdidos en cierta manera.
ResponderEliminarCercas me gusta, no puedo valorar si le sobran páginas porque no lo he leído pero suele ser un mal general en muchos autores y autoras (por cierto, la fecha debe ser 2012 ¿no?).
Abrazos!!
Ya, Laura, en cierto modo perdidos, aunque nunca se sabe a dónde pueden llegar.
EliminarClaro, claro, es 2012. ¡Ando bueno!
Abrazos
Es verdad, cómo se delimita la silueta de una novela, su perfil exacto. ¿Lo indica ella misma, como ser vivo que es, o el autor es un dictador que no escucha a nadie más que a sí mismo forzando un camino al que aquélla se resiste? ¿El escritor se aleja de los planes iniciales, si ella se lo pide, o se empeña cerrilmente en ellos?
ResponderEliminarPor lo visto, ebge, depende de varios factores: de su capacidad de escucha (como apuntas), de la premura, de las exigencias del mercado...
Eliminar